Si, es un poco tarde para escribir este artículo. Y realmente lo siento mucho. Pero como el 2017 fue un excelente año (mejor que el 2016, inclusive), su éxito desbordó hasta copar este mes con mucho trabajo, augurando un 2018 lleno de mucho trabajo y excelentes cositas buena para este blog.

Y eso me preocupa, porque sin lugar a dudas este año será el año de las vacaciones.

Y es que, como todos los queridos lectores saben, yo soy un abogado independiente, y soy solo yo: Soy el que escribo este blog, el que lo edito (a veces o hago mal, pero lo hago!), el que reviso los comentarios, mi propio community Manager, mi propio secretario… y todo eso sin contar con que soy conciliador en insolvencia y debo estar sentado una hora vigilando que un deudor y sus acreedores no se maten entre ellos.

Si, todo eso desgasta. ¿Y saben cuándo tuve mis últimas vacaciones en serio? R: En 2016. Y antes de ese año, mis últimas vacaciones fueron en 2014. Es decir, yo sólo tengo vacaciones cada dos años, y eso es malo para uno que es independiente, ya que ninguna suma de dinero compensará el tiempo de vida que se pierde por no tener vacaciones. Es más, todos los abogados pensionados que conozco lamentan no haber descansado más cuando fueron jóvenes. Se metieron tanto en el litigio que se les olvidó que la vida es algo más que cargarse con los problemas de la gente y escuchar las estupideces de abogados mentalmente inferiores (desde los que creen que van a cobrar plata insultando a un deudor hasta los que se echan pajazos de filosofía del derecho que no sirven en la vida real, pasando por los que todavía creen que su verborrea jurídica es directamente proporcional a las habilidades psicosociales de las que carecen, como escribir claro y conciso).

Todo esto se los digo para que se preparen, porque en cualquier momento pasarán meses sin que escriba algo en este blog, o porque es posible que me demore en contestar las consultas con costo (no más de los tres días hábiles que garantizo, ya que jamás me pasaría de ese periodo. Eso lo tengo claro). No obstante, tienen mi palabra de que continuaré ofreciéndoles mi profesionalismo y atención como se la merecen. Más ahora que terminé mi diplomado en derecho inmobiliario en la Javeriana de Cali, que me permitirá ofrecerles ahora estudios de títulos!

Considero que este será un año donde se definirán muchas cosas, que en la medida de lo posible me harán un abogado más maduro de lo que ya soy y eso se verá reflejado en el servicio. Además, como es un año de elecciones, y de mundial, lo percibo como un año igual a 2014.

¿Subiré la tarifas?

Y hablando de 2014, ese fue el último año en que decidí subirle a las consultas con costo, después de 4 años cobrandolas a un precio bastante inferior. Muchos colegas me han pedido que las vuelva a subir, por respeto a la profesión, pero no lo haré (por ahora) por lo siguiente:

1. Finalmente, la situación del país no está para cuchara, y más que se acercan las elecciones y el mundial de fútbol: Tal vez en el futuro lo haga, si mis gastos aumentan. Pero por ahora eso no lo veo viable dado el panorama que se avecina.
2. Prefiero mil veces trabajar sobre volumen, cobrando algo económico, que cobrar caro y tener solo unos pocos casos al mes.
3. Hasta ahora, la respuesta a mis servicios ha sido excelente. Y no me puedo quejar. Que mejor forma de premiar a mis clientes (a los pasados, y a los futuros) que congelando los precios aunque deba subirlos porque llevo 4 años con la misma tarifa.

Pero, es algo que honestamente no descarto. Tal vez, viendo como se ponga todo decida subirlas a mitad de año (sobre todo el servicio de retiro de centrales de riesgo, que si es muy económico comparado con la competencia), pero francamente es algo que no quiero hacer ni tampoco veo la necesidad de hacerlo.

Finalmente, quiero agradecer a todos ustedes por su apoyo: Las entradas a este blog cada vez tienen mayor recepción, tanto las nuevas como las más antiguas. Veo con orgullo como algunas de ellas son citadas en tesis de grado, y como algunos abogados recién egresados me cuentan que este blog les ayudó en su carrera. De verdad que el mayor agradecimiento es saber que estoy siendo alguien de utilidad en la vida de otras personas.

Promesas… Promesas…

Desde el 2016 les vengo prometiendo que meteré el derecho tributario en este blog, y no lo he hecho. Eso me preocupa, porque este es un tema que las persona deben conocer. Así que esta será la única promesa que haré este año: Enfocarme más en el derecho tributario para personas naturales. La verdad, no lo he hecho porque ahora que conozco el Derecho Tributario me parece súper aburridor. Como hecho para personas muertas por dentro. Y como lo cambian a cada rato, se vuelve más un área del derecho llena de especulaciones que de certezas.

Ah si!, además este año habrá una nueva reforma tributaria, ya que la de 2016 no sirvió para un carajo. Se veía venir, por eso no hablé sobre esa reforma.

Los números claves del 2018:

Salario mínimo para el 2018: $781.242 (como lo dije en 2017, usted vivirá igual que en 2016 con ese salario mínimo)

Auxilio de transporte para el 2017: $88.211 (que va a quedar en nada porque las tarifas de bus aumentarán este año en muchas ciudades)

UVT 2018: $33.156

Este será un excelente año! Así lo presiento y así lo declaro.